¡Buenos días Damas y algunos Caballeros!

¡Hola preciosuras!
Hoy es la quedada mensual de las #Diogeneras. Este mes va a ser un poco diferente a meses anteriores. Este mes, en lugar de un DIY, hemos recorrido, cámara en mano, nuestros pueblitos y ciudades en busca de cosas diogeneras bonitas y originales. Y ¿qué quereis que os diga? Son graciosas las cosas que nos podemos llegar a encontrar.
En mi pueblo, sin ir más lejos, en medio del Parque Central (a falta de nombre más original) podemos encontrar, junto a la fuente grande (que os enseñaba aquí) de debajo del puente (que a quién se le ocurrió la genial idea de ponerla ahí debajo con lo poco que luce), una especie de cuadros gigantes a doble cara con unas Meninas (al menos yo las llamo así) hechas con materiales reciclados de todo tipo. Desde latas y botellas de leche a teclados y monitores de ordenadores.

¡Hola preciosuras!
Un mes más nos vamos de viaje a través de nuestros ordenadores por los pueblitos bonitos, ciudades, províncias y países en el tour #BloggerTraveller organizado por Paty. ¿No sabes de qué se trata? Pues clica aquí y ¡entérate!
Este mes la palabra propuesta es el #Blanco. En El Campello no tenemos nieve blanca que cubra con su manto todo lo habido y por haber pero sí que tenemos casitas blancas, barcos blancos, edificios blancos, mobiliario urbano blanco, y supongo que será por eso que estamos en el Corazón de la Costa Blanca pero El Campello tiene arena y piedras blanquitas y también mucha espuma marina ^.^
A lo largo de los años, El Campello ha tenido modificaciones urbanísticas importantes sobre todo en la costa. El motivo de todos estos cambios, además del aumento de la población, es que el mar destrozaba cualquier cosa a su paso cuando había temporal.
Os voy a enseñar unas cuantas imágenes de los cambios que han ocurrido.
Las primeras que deberíais ver son las de hace más de 40 años aquí.

El Campello...

Si los lugares, las piedras, las cosas hablaran... nos contarían muchísimas historias. Historias de cuando aún no existía internet (sí, hubo un tiempo en que no existían ni internet ni los ordenadores). Historias de cuando incluso no existían ni la electricidad ni el agua corriente. Historias de cuando ni podíamos viajar en avión ni en coche. Historias de leyendas. Historias de paz. Historias de guerras. Pero sobre todo: Historias de vidas. Y en El Campello hay un lugar donde nos podrían contar muchas historias. Se trata de la zona de La Illeta y la Torre vigía. Y aunque se cree que hay muchos más restos de los ya encontrados, aún no han sido hallados.

Se han encontrado restos de la edad del bronce, de la época íbera, de la época romana... pero ¿quién vivía aquí? ¿cómo se las apañaban para conseguir los recursos básicos para vivir? ¿eran jóvenes, niños, adultos, viejos? ¿qué hacían?

Cuando era pequeña me gustaba mucho imaginarme historias de piratas que acechaban la costa, inventarme historias de viajes, aventuras y tesoros ^.^ Qué bonica... Lo que puede hacer la imaginación. Mantener a los niños ocupados por horas, semanas, meses, años... y aún siendo adultos, recordar con nostalgia y con una sonrisa dibujada lo que dejamos atrás.



Ya os conté que estaban realizando Guías teatralizadas en este lugar para acercarnos a la historia de la posible vida cotidiana de supuestos personajes que pudieron haber habitado esta costa. Y ¡¡conseguimos entradas para ir!! Yujuuuuu ^.^ Es ideal para ir en familia. Abilea lo pasó genial :)

Aquí estamos antes de entrar a la visita.



 Una parte de la visita era arriba de la Torre de vigía, y ¡estas son las vistas!

Aquí os explicaba un poco más de la historia de los edificios emblemáticos de El Campello. Aquí os dejo el enlace al tráiler de la presentación y si queréis ver un poco más de historia de este lugar tan especial podéis hacerlo desde la página del MARQ aquí.


Ahora me voy de viaje por los pueblos y ciudades de mis compañeras. La organizadora de este tour es Paty y si tú también quieres venirte con nosotras de viaje puedes acceder a la guía desde aquí.

Cuando Paty de Mi dulce de melocotón nos propuso el tema de este mes para el #BloggerTraveller me dije... ¿fuentes? ¿fuentes? Peeeeeeero ¿fuentes? La verdad es que dando una vuelta por El Campello podemos encontrar poquitas fuentes propiamente dichas y todas todas son de reciente construcción. 
Pensando en cómo lo harían cuando aún no había agua corriente llegué a una conclusión: Pozos. Los he visto en la mayoría de las casas que aún se conservan (mis dos yayas tienen pozos en casa). Aunque este no es el tema que nos ocupa hoy así que: "Pasa palabra" :)
Fuentes... las hay de muchos tipos: decorativas, proveedoras de agua, de alimento, de inspiración, de conocimiento, de diversión... ¿se os ocurre alguna más? hmmmm.
Llegando a El Campello desde Alicante por la carretera general podemos encontrar una fuente en la primera rotonda. Ha tenido mejores momentos (pese a su "reciente construcción" ya ha tenido que ser reconstruida porque un coche decidió no hacer la rotonda y quedarse dentro de la fuente... no sé si tendría calor o qué, ejem). 

Vista desde la otra parte.
Y luego al atardecer ^.^

Hay otra fuente en el Parque Central (todo de reciente construcción que están remodelando -parece que no se pueden hacer las cosas bien a la primera ¬¬') a la que no se puede acceder hasta nueva orden porque están en obras. Tengo alguna foto de cuando la abrieron en su momento. Se hizo en conmemoración del Centenario del pueblo y alrededor de ella se pusieron estatuas representando los oficios tradicionales del pueblo. Algunas de ellas también tuvieron que retirarse porque las rompieron Oo'
Y hay alguna más en la página de turismo de El Campello. La fuente aquí, je je.
Había una fuente típica en mi pueblo. Y digo había porque la cerraron y la llenaron de tierra para plantar flores según la época del año, y en Navidad ponen el árbol allí. Yo me acuerdo de haberla visto de pequeña, incluso encendida por la noche con luces de colores que iban cambiando según los chorros que estuvieran saliendo en ese momento. Está situada en la comúnmente conocida: "Plaza de la Rana".
Recuerdo haber visto fotos por casa de mi madre peeeeeeero tendré que buscarlas más concienzudamente y en un futuro editaré la entrada para ponerlas.
La que sí os quiero enseñar es una imagen de fuente de ¿tranquilidad? ¿inspiración? a la orilla del mar.
Y por último, pero no por ello menos importante. Un par de fotos de La fuente de Los Luceros de Alicante. Pasamos por allí bastante ;)

Y otra del año de Maricastaña -a principios de los 30- 

¡Hola preciosuras!
Lo sé lo sé, últimamente no estoy publicando con la asiduidad de siempre y no es porque haya encontrado el trabajo de mi vida y no tenga ni un hueco libre más que para descansar y comer ¡qué va! Sino todo lo contrario y, además, con unas cuantas pérdidas tanto monetarias como familiares (lo cual ha empañado sobremanera la celebración de mi cumpleaños). Ahí es nada. Y me he quedado "un poco bastante" tocada emocionalmente, que en mi opinión es una de las peores formas de que te toquen. Primero porque pienso que la actitud frente a la vida, frente a los problemas que surgen, las dificultades, las añoranzas, las pérdidas... si son positivas, si te sabes reponer, si buscas soluciones, son las que te hacen mirar el mundo de forma diferente, Seguir adelante y además, con una sonrisa en la cara. Aunque en un rincón de tu corazón estén bajo llave la congoja, la pena, el desánimo, todas las lágrimas del mundo. Y esas, esas no las puedes dejar salir nunca porque una vez que lo hagan, no se pararán. Y llevo un tiempo que pretendo tener la actitud pero mi corazón no me acompaña. Así que espero tener la fuerza de voluntad para mantener alejados de mi todos los sentimientos que hacen que me detenga y que no me permiten avanzar.
Unas puertas se cierran, otras se abren. Literal o metafóricamente las puertas cerradas te cortan el paso, no te permiten acceder al interior, ¿desaparece una oportunidad?. Si estás dentro no te dejan salir o incluso ¿te protegen? Si están abiertas dejan que pases, te ofrecen una opción, incluso una esperanza. Dicen que cuando una puerta se cierra otra se abre. Ahora sólo tengo que encontrar la que está abierta.
Y os preguntaréis qué me ha dado con las puertas... ja ja ja. Y es que en la iniciativa de #BloggerTraveller de este mes Paty desde Mi dulce melocotón nos proponía como tema las Puertas.
 --Patyyyy ¿¿habemus niñaaaa??-- No... aún no--
Así que hoy os voy a enseñar unas cuantas puertas de mi pueblo y os voy a contar alguna historia relacionada con ellas.
En el barrio de pescadores que os enseñaba el mes pasado aquí, las puertas eran grandes, de madera robusta y tenían tanto delante como detrás. La explicación es bien sencilla. Antiguamente no se tenía un paseo tan bien arreglado y acondicionado como ahora. El mar le ganaba terreno a la tierra y lo único que los separaba en días de tormentas y mar embravecido era... ¿nada? Así que en lugar de ponerle trabas al mar abrían sus puertas y dejaban que pasara el agua para que no ocasionara destrozos. En días normales estaba el mar, sus barcas, las redes y demás herramientas de pesca y...Sus casas. Que no digo yo que la estampa fuera bonita, incluso sobrecogedora, pero visto desde ahora, abrir la puerta de casa y encontrarse con...
De la otra forma... todo sujeto a cambios, al capricho del mar que da vida pero también puede quitarla con facilidad.
Y vista desde delante.
Se ha hecho obra para subir el suelo y adecuarlo a las necesidades actuales y a lo largo del tiempo se tiene que volver a acondicionar la fachada y todo lo demás porque el salitre lo estropea todo, cosas que tiene el tener una casa en primera línea. Hace ya tiempo os enseñaba la vista desde la ventana aquí.
La casa de la yaya es una de las pocas que perduran a lo largo del paseo de El Campello. La mayoría fueron vendidas y reconstruidas en edificios, comercios como bares, restaurantes, heladerías, cafeterías -terrazas de solaz- proliferaron rápidamente al convertirse en destino turístico frecuente. Aunque de vez en cuando podemos ver, entre heladería y restaurante fachadas y puertas como ésta.
Que si os fijáis es mucho más grande que la de la yaya. Fijaos en el sillón que hay al lado de la puerta... y echad cálculos.
Y cerca de ésta, otra mucho más moderna y de concepto más abierto. Que te permite ver lo que hay fuera pero si estás fuera no ves lo de dentro.
En segunda línea de costa, vamos, en la calle paralela sí que hay más casas "de las de antes". Ya os enseñaba esta el año pasado en el mes del #azul
Unas casetas de "reciente" construcción. Se han colocado a lo largo de la playa en puntos estratégicos coincidiendo con puestos de vigilancia señalados.
Y por último, aunque no menos importante. Una foto que quería enseñaros hace ya tiempo. Antiguamente -bueno, y ahora también pero mucho muchísimo menos- Las mujeres se sentaban en las puertas de sus casas a hacer labores. Esta Navidad en la comida de primos sacaron fotos y documentos de ---¿MariCastaña?--- la familia. Y entre ellas encontré una que me gustó mucho. Y pensé: Esta va para el blog.
Reflejo de una época no muy lejana aunque se nos antoje como del Jurásico y que nuestros hij@s ni se imaginarán.
Si te apetece seguir con el viaje puedes hacerlo desde aquí.

La vida gira en torno al agua... ya sea de un río, una fuente, un pozo o el mar. Necesitamos agua para sobrevivir. ¡Somos agua en un elevado porcentaje!
Este mes en #BloggerTraveller vamos a hacer un repaso por el agua que podemos encontrar en nuestros pueblos. Y en El Campello, amigas mías, agua hay... y bastante -aunque salada en su mayoría-.
Mi pueblo ha sido marinero desde siempre -ahora también pero ha perdido relevancia ya que de tener la mayor flota pesquera del Levante ha pasado a tener muy pocos barcos-, y también ha tenido una parte agrícola (de menor importancia ya que el agua dulce era -y sigue siendo- escasa por estos lares).
Así que hoy voy a dar una mirada al pasado y a enseñaros escenarios de mi pueblo como era antes... así, del barrio de los pescadores. Aquellos que extraían la vida del mar aunque muchas veces encontraran la muerte en ella.
Estas fotos pertenecen a mi familia así que, aunque no debería hacer falta decirlo, si las cogéis o reproducís en cualquier medio: citad de dónde las habéis sacado.
Frente a Alicante.
 Y mi Abuelo materno después de pescar. Esta calle es la que engalanaron aquí, o donde juegan a pilota aquí.

Ahora el pueblo ha cambiado, por supuesto, y ya no se vuelca en la marinería pero sí en el mar. Somos un pueblo turístico del que puedes ver fotos preciosas aquí, aquí o aquí.
Yo ahora voy a ver a mis compañeras de viaje aquí. ¡Paty! ¡Empezamos el tour!

¡Hola preciosas!
Un mes más nos embarcamos en un Blogger Traveller, dedicado esta vez al color Rojo. ¿No sabes lo que es el Blogger Traveller? Pues desde aquí Paty te lo explica requetebién.
Y yo os voy a contar un poquito de un deporte poco conocido que se practica en mi pueblo: la pilota valenciana, y dentro de ella la modalidad de: llargues. Y ¡se juega en la calle! 
Y os preguntaréis ¿pero a eso juega alguien? Pues sí chicas sí, y no son viejunillos precisamente, ¡que son jovenzuelos! Venga va... ¡que sí! y los locales ¡juegan de rojo!

Se preparan para jugar poniéndose protecciones en los dedos y las manos ya que se juega con la mano y la pelotica "pica" un poquito cuando le das (cuando era más joven jugué una temporada pero en otra modalidad: el raspall, pero esa se juega en un trinquet). El de la foto es mi primo Luis. 


Esta partida la jugaron en la calle San Vicente (os la enseñaba en verano aquí decorada "diogeneramente" para las fiestas patronales  y va paralela a la playa, al fondo aún se ven algunos de los adornos). Aunque la mayoría de veces juegan en la Calle Santa Teresa (la de detrás de la Iglesia que os enseñaba aquí).
Cada equipo está formado por 5 jugadores, repartidos en diversas posiciones cada uno con una función.
Para ganar han de conseguir 8 juegos. La puntuación en cada juego se compone de quinces (como en el tenis) con una diferencia de dos sobre el contrario.

Una vez se ha sacado y la pelota ha sido restada (devuelta) por el otro equipo, cada equipo tendrá que devolver la pelota siempre al aire o al primer bote, continuando hasta que alguno de los dos equipos falle.
Si queréis ver el Reglamento de las diferentes modalidades de la Pilota Valenciana podéis descargarlas aquí (están en Valenciano).
Y no podía dejar de enseñaros la playa de mi pueblo, je je je. Con buen tiempo, con viento y lloviendo... Que aquí tenemos de todo aunque no lo parezca.


¿Os animáis a ver el color Rojo del resto de ciudades participantes? Pues podéis hacerlo desde Aquí.